HISTORIA
Fundada en pleno sigo XVII, hacia 1665-1666, tiene como base el entonces templo Hospital de Ntra. Señora del Carmen (antiguo hospital de mujeres) situado en la calle Columela esquina con la calle Feduchi.
Por documentos existentes se sabe que como tal la hermandad existía en 1668, lo que acredita la fundación en los años inmediatamente anteriores. En 1668 “sacaban a la calle en procesión imagenes prestadas”, también sabemos que su fundador fue Jacinto de la Plata y que en 1677 se extingue.
Los documentos acreditan también que probablemente fuera gremial de mulatos, en Cádiz existía una cofradía que aglutinaba a “los negros” o “morenos”, con la advocación de Virgen del Rosario. La virgen de esta cofradía fue profanada por los anglo-holandeses cuando en 1596 sitiaron Cádiz, venerándose esta imagen tal y como quedó, bajo el nombre de “La Vulnerata” en Valladolid donde llegó en 1600.
La reorganización de la Cofradía del Santísimo Cristo del Ecce Homo tiene lugar en el siglo XVIII ya en la Iglesia de la Conversión de San Pablo, templo fundado en 1678. En 1789, como el templo era insuficiente, se acuerda ampliarlo en conjunto con la Cofradía del Santo Rosario de Nuestra Señora del Sagrario de Toledo.
Por dicha contribución a la ampliación y reforma del templo, le es concedido “perpetuamente el patronato del altar mayor, y poder colocar la efigie de su santo titular“; del mismo modo, se le cede dos altares en el lateral del templo para la Virgen de las Angustias y San Juan Evangelista.
El retablo mayor de marcado estilo neoclásico , es una bella obra original del Arquitecto Manuel Tolsá (1757-1813) datado en 1791. Formada su arquitectura por nobles mármoles de colores correspondiendo su estilo al mas depurado neoclacisismo. La bellísima escultura de la imagen de nuestro sagrado titular, es una talla de José Montes de Oca (1668-1748) y realizada en 1730. La cotitular, Ntra. Señora de las Angustias, es una talla de candelero del gaditano José Fernández Guerrero (1748-1826); mientras que la de San Juan Evangelista se debe a Doménico Giscardi (1725-1805) escultor genovés afincado en Cádiz.
La talla del Señor del Ecce Homo, es de una calidad escultórica sublime. Montes de Oca, es un artista seguidor del arte de Juan Martínez Montañés. Sus obras repartidas por toda España, evidencian el buen hacer en la escultura andaluza del S. XVIII.
El prestigio y la elegancia que esta Archicofradía del siglo XVII ha tenido a lo largo de su existencia no ha caido en absoluto y actualmente sigue siendo una pieza fundamental en los desfiles del Martes Santo gaditano. Además, el característico manto que luce el Señor, acentúa su carácter y la distingue de todas las demás de Andalucia. La estampa casi novecentista que la Archicofrádia pone en la tarde-noche del Martes Santo, merece bien la pena contemplarla cuando sale del Tempo de San Pablo, en pleno centro de la capital.
Otro punto a destacar es la belleza neoclásica de la Dolorosa gaditana. Gaditana por que su autor lo era y por conservar aun hoy esas manos entrelazadas tan identificativas de nuestra ciudad, además de ser la imagen que lleva mas décadas procesionando acompañada del discípulo amado, en la Semana Santa gaditana.